En 2024, Colombia reafirmó su compromiso con los derechos de las niñas, niños y adolescentes al concluir el año con dos grandes noticias.
Por un lado, fue el país anfitrión de la Primera Conferencia Ministerial para Erradicar la Violencia contra Infancia y Adolescencia, organizada con el apoyo del gobierno de Suecia, UNICEF, la OMS y la Representante Especial del Secretario General de las Naciones Unidas sobre la Violencia contra los Niños.
Durante los días 7 y 8 de noviembre, altas autoridades provenientes de 119 países se congregaron en Bogotá, para debatir y comprometerse con la protección de la infancia y adolescencia en diferentes esferas: el hogar, el colegio, la comunidad, y los entornos digitales.
Además, este evento contó con conferencias satélites, las cuales facilitaron el intercambio y el diálogo inclusivo entre múltiples actores de interés, como organizaciones del tercer sector, delegaciones ministeriales, agencias de organismos multilaterales, y delegaciones de niñas, niños, adolescentes y jóvenes sobrevivientes de violencia, quienes aportaron su perspectiva desde distintos contextos.
Durante esa semana, los esfuerzos se centraron en promover la igualdad y avanzar en la Agenda 2030, abordando temas prioritarios como las situaciones de crisis –conflictos armados, desplazamientos, reclutamientos de menores, desastres naturales–, financiamiento público, movilidad humana, derecho a crecer en familia, retos digitales, educación inclusiva, violencia de género –violaciones, trata, maltrato, mutilación genital femenina, matrimonios y uniones tempranas, maternidad forzada–, sistema de responsabilidad penal para adolescentes, entre otros.
Este espacio marcó un hito histórico al reunir voces de todas las edades y regiones del mundo, consolidando un diálogo global en torno a un objetivo en común: impulsar cambios significativos en las políticas públicas, movilización de recursos, y demostrar que la prevención de la violencia es posible. En este contexto, se enfatizó la viabilidad de cumplir con la meta 16.2 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que busca eliminar el maltrato, la explotación, la trata y toda forma de violencia y tortura contra la niñez. Este compromiso global apela a la responsabilidad, a un trabajo integral, cooperativo, multisectorial e interinstitucional.
Más allá del valor simbólico de la conferencia, en esos días de trabajo se alcanzaron acuerdos trascendentales, como el lanzamiento del primer movimiento global dedicado a la prevención de la violencia infantil, liderado por niñez, adolescencia y juventudes que quieren ser los conductores y voz activa de sus pares en el presente y futuro. Igualmente, se presentó una iniciativa colectiva de protección de la niñez que será liderada por los Gobiernos, y la creación de una plataforma global donde sobrevivientes de violencia puedan compartir sus experiencias como parte de su proceso de sanación.
La Primera Conferencia Ministerial para Erradicar la Violencia contra Infancia y Adolescencia concluyó con la adopción del Llamado a la Acción de Bogotá, un documento que sintetiza compromisos y objetivos clave para construir un futuro libre de violencia para la niñez. Hasta el momento, 46 países se han adherido a esta iniciativa, reafirmando su compromiso con la protección de los derechos de la infancia.
Durante el cierre, las altas autoridades presentes hicieron un llamado a la comunidad internacional para sumar esfuerzos a esta causa. En palabras del Canciller de Colombia “nuestro Llamado a la Acción de Bogotá se enfoca en la urgente necesidad de poner fin a la violencia contra la niñez que afecta a más de la mitad de la infancia a nivel mundial”.
Este acuerdo no solo representa un compromiso político, sino también un llamado ético y urgente a la acción colectiva, donde las voces de niñas, niños y adolescentes deben tener el poder de transformar programas y políticas públicas para que les beneficien. La magnitud del desafío exige respuestas inmediatas y coordinadas, tanto en la esfera pública como en la privada. Por ende, es imperativo desarrollar estrategias que trasciendan los discursos, prioricen inversiones concretas, cooperen internacionalmente y se desarrollen políticas públicas integrales.
El “Llamado a la Acción de Bogotá” simboliza un paso decisivo hacia la construcción de un mundo donde ninguna niña, niño o adolescente sea víctima de violencia, recordando que garantizar sus derechos no es solo una responsabilidad de los gobiernos, sino un deber compartido por toda la sociedad.
Fuente: Pressenza International Press Agency, 2024.
Por otro lado, el 14 de noviembre de 2024, Colombia cerró una deuda histórica con la infancia y adolescencia, tras eliminar un artículo del Código Civil que permitía los matrimonios y uniones desde los 14 años, siempre que contaran con el permiso de madres, padres o tutores legales. Este artículo, vigente desde 1887, fue modificado gracias al consenso de diversos partidos políticos y a la aprobación de un proyecto de ley por el Congreso de la República.
Esta reforma es un paso significativo en la lucha contra todas las formas de violencia de género, como son las uniones tempranas, es decir cuando ambos o uno de los compañeros es menor de 18 años. Asimismo, demuestra que las leyes deben estar en una constante revisión y actualización, para garantizar los derechos humanos y erradicar o reducir situaciones o prácticas que vulneran los derechos.
Sin embargo, las modificaciones legislativas deben ir acompañadas de esfuerzos de sensibilización y pedagogía, a fin de transformar costumbres que quebrantan, de lo contrario las violencias se van normalizando, perpetuando y olvidando, perjudicando las historias de vida de miles o millones de personas.
De acuerdo con datos de UNICEF, en Colombia una de cada cinco adolescentes está unida, y una de cada diez niñas entre los 10 y 14 años se encuentra en esta situación. En suma, el país ocupa el puesto 20 a nivel mundial con respecto al número de niñas casadas o unidas antes de cumplir los 15 años, y en América Latina y El Caribe está en el puesto 11 en adolescentes unidas antes de cumplir los 18 años (Venegas, 2024), cifras que evidencian la llega tarde del gobierno, para la protección plena de la infancia y adolescencia.
Pese a ello, la aprobación de esta ley, conocida popularmente como “Son niñas, no esposas”, es un testimonio del poder de la persistencia y resiliencia colectiva, por lo cual es un triunfo que se celebra y reconoce el trabajo de las representantes que llevaron esto ante las dos cámaras.
Este logro fue el resultado de múltiples intentos previos en el Congreso, enfrentando obstáculos sociales, políticos y culturales profundamente arraigados, lo cual demuestra que los cambios estructurales pueden ser lentos, pero la constancia en la defensa de los derechos humanos puede romper barreras y superar costumbres y prácticas que han perjudicado a millones de niñas en el país.
Cabe destacar que, la ley busca fortalecer la política pública nacional de infancia y adolescencia mediante un Proyecto Nacional de Atención Integral a Proyectos de Vida digna para niñas, niños y adolescentes. Esta iniciativa pretende incluir estrategias para prevenir matrimonios infantiles, uniones maritales de hecho y uniones tempranas, con gran foco en áreas rurales apartadas, donde se espera que los pueblos indígenas participen de este programa de prevención, teniendo en cuenta su marco de autonomía, dado que alrededor de un tercio de las niñas indígenas son casadas antes de cumplir la mayoría de edad.
Si bien aún queda un largo camino por recorrer, la aprobación de esta ley representa un paso que blinda los derechos de niñas, niños y adolescentes. Al eliminar prácticas nocivas como el matrimonio infantil y las uniones tempranas, se abre la puerta para el empoderamiento, la justicia, el desarrollo integral y la calidad de vida de la niñez. También contribuye a romper ciclos de violencia y pobreza, impulsando la continuación de los estudios y plan de vida, garantizando sus derechos fundamentales.
En definitiva, Colombia demuestra que los cambios estructurales son posibles cuando existe voluntad política y un compromiso con los derechos humanos. Estas victorias subrayan la importancia de crear conciencia sobre las injusticias sistémicas, promover y compartir buenas prácticas, y mantener un enfoque firme en la protección de los grupos históricamente más vulnerables, como la infancia y adolescencia.
No obstante, la verdadera transformación dependerá de la implementación efectiva de lo acordado, tanto en la Conferencia como en la Ley. Esto requerirá la capacitación de las y los funcionarios para garantizar respuestas adecuadas, financiamiento público sostenible, una sólida coordinación, la cooperación con la sociedad civil, y la inclusión de las voces y experiencia de las y los sobrevivientes en los procesos de toma de decisiones, además, será fundamental hacer frente a los discursos y movimientos anti derechos para no retroceder.
Alejandra Brand Delgado // Experta en violencia de género
1.- Cancillería de Colombia, 2024. Colombia lidera un llamado global a la acción para proteger a la niñez en la clausura de la Primera Conferencia Ministerial Mundial contra la Violencia Infantil. Disponible en https://www.cancilleria.gov.co/newsroom/news/colombia-lidera-llamado-global-accion-proteger-ninez-clausura-primera-conferencia
2.- Gobierno de Colombia, Gobierno de Suecia, UNICEF, OMS y la Representante Especial del Secretario General de la ONU sobre la violencia Contra los Niños, 2024. 1st Global Ministerial Conference on ending violence against children. Disponible en https://endviolenceagainstchildrenconference.org/#about
3.- Muñoz, A. 2024. Colombia: Histórica Conferencia Ministerial Mundial para poner fin a la violencia contra la niñez. Pressenza International Press Agency. Disponible en https://www.pressenza.com/es/2024/11/colombia-se-realiza-la-primera-conferencia-ministerial-mundial-para-poner-fin-a-la-violencia-contra-la-ninez/
4.- Oficina de Prensa representante Alexandra Vásquez, 2024. A un paso está la eliminación del matrimonio infantil. Congreso de la República de Colombia, Cámara de Representantes. Disponible en https://www.camara.gov.co/a-un-paso-esta-la-eliminacion-del-matrimonio-infantil
5.- RTVE, 2024. El Congreso de Colombia aprueba una ley que prohíbe el matrimonio infantil. Disponible en https://www.rtve.es/noticias/20241114/congreso-colombia-aprueba-ley-prohibe-matrimonio-infantil/16329933.shtml
6.- Villero, K. 2024. Plenaria del Senado aprobó la ley, “Son niñas no esposas”. Senado de la República de Colombia. Disponible en https://www.senado.gov.co/index.php/el-senado/noticias/5993-plenaria-del-senado-aprobo-la-ley-son-ninas-no-esposas
7.- Venegas, G. 2024. Colombia da un paso histórico en la protección de menores con la eliminación del matrimonio infantil. Noticias ONU. Disponible en https://news.un.org/es/story/2024/12/1535221?utm_source=Noticias+ONU+-+Boletín&utm_campaign=980a9492c5-EMAIL_CAMPAIGN_2024_12_19_01_23&utm_medium=email&utm_term=0_e7f6cb3d3c-980a9492c5-106942397